Digamos que estás planeando un viaje con tu novia/o a Europa. Estás emocionadísimo/a y no paras de pensar en lo rico que será la experiencia. Entonces, agarran esa emoción y ¡bum! manos a la obra, comienzan a planear todo.
Primero, investigan que países visitar y discuten cuales serían mejor. Luego, empiezan a ver hoteles o Airbnbs para evaluar los precios y su localización. Después, tienen que ver las 9 millones de atracciones que existen en Europa y decidir cuales visitar en el tiempo que tienen. Por último, tienen que elegir entre 15 millones de restaurantes que hay en Europa para saber dónde comer. Finalmente, después de varias horas, acaban.
¡Yuju! Terminaron de programar su viaje.
Inesperadamente recibes una llamada de un amigo y te dice: “Mira, mañana hay que reunirnos, ¿que hora te cae mejor?: las 8 am o 11 am”
De repente, esta decisión se vuelve la más difícil en tu día y no sabes que responder…
¡Bienvenido al mundo de la fatiga de decisiones!
La fatiga de decisiones
Ejemplos como el anterior nos ha pasado a todos en diferentes situaciones, ya sea planeando un viaje, una fiesta, una boda, en el trabajo, en entrevistas (ya veremos por qué) o en un largo día de estudio.
Siempre llega un momento del día donde no somos capaces de tomar decisiones óptimas, actuamos por impulso o no actuamos. No tenemos ese nivel de certeza que rodeaba las decisiones tomadas temprano en nuestro día. ¿Qué es lo que nos pasa en estos momentos?
Estamos bajo el efecto de la fatiga de decisiones.
La fatiga de decisiones consiste en que nuestra habilidad de tomar buenas decisiones se irá deteriorando a medida que más decisiones se tomen a lo largo del día.
Este fenómeno fue descubierto, explicado y demostrado en distintos experimentos por el psicólogo social Roy F. Baumeister. Este efecto, quiere decir que la calidad de la decisión que tomes a primera hora en la mañana, no se va a comparar con la calidad de decisión que tomes en la tarde; lo cual hemos experimentado muchas veces.
Por ejemplo, puede ser que tuviste un día difícil de trabajo y estás cansado. Al no tener nada que comer tomas la decisión más fácil y te compras un McDonald’s o si te pregunta tu esposo que quieres de comer le respondes: “lo que sea”, queriendo no tomar una decisión. También, puede pasar que llegas a tu casa y es mucho más difícil no ver Netflix que en otros momentos del día.
Ahora bien, antes de saber cómo combatirlo debemos responder la pregunta, ¿Por qué ocurre la fatiga de decisiones?
Como se genera la fatiga de decisiones
Nosotros somos máquinas de tomar decisiones. De hecho, investigando para el artículo me encontré con una estadística repetida en varias páginas que establecía que tomamos al día alrededor de 35.000 decisiones.
Lamentablemente no encontré el estudio original y ninguna página lo citaba, pero hubo un estudio que estableció que tomamos alrededor de 226,7 decisiones diarias sólo eligiendo qué comer.
Puede que 35.000 sea un número exagerado, pero no podemos negar que tomamos muchas decisiones desde que nos despertamos, ya que tienes que decidir:
- Si apretar el botón de dormir 5 minutos más.
- Si ver tu teléfono al despertar.
- Qué vas a desayunar (esta decisión tiene micro decisiones).
- Qué te vas a poner (cada artículo de ropa es una decisión más).
- Si orinar antes de salir de la casa.
- Etc.
Nuestra lógica nos dice que mientras más hagamos algo en un período de tiempo, más nos cansaremos haciendo esa actividad. Si corres por 5 horas te vas a cansar, si bailas mucho, te vas a cansar, si ves mucho Netflix, te cansarás de estar sentado viendo películas.
En el caso de las decisiones ocurre exactamente lo mismo. Así como nosotros tenemos un nivel limitado de energía para ciertas actividades, también tenemos un nivel de energía mental limitado para tomar decisiones y a medida que es usado va a causar la fatiga de decisiones.
La energía mental, la fatiga de decisiones y ¿la comida?
La idea de tener energía mental o fuerza de voluntad limitada proviene de un término en la psicología llamado el agotamiento del ego. La fatiga de decisiones es el resultado de ello.
Imaginemos que nuestro cerebro es una barrita de energía. Mientras más decisiones tomemos nuestra barrita de energía se va disminuyendo poco a poco.
Cada vez que disminuye nos volvemos más y más irracionales a la hora de tomar decisiones. Evaluamos menos la información presentada y nuestros costos de oportunidad. A su vez, somos más susceptibles a compras por impulso o ser persuadidos por trucos de mercadeo.
De hecho, otro motivo no explicado en mi artículo anterior por el cual los supermercados ponen los dulces en las cajas de pago es que ellos saben que tomaste muchas decisiones eligiendo qué comprar. Al tomar muchas decisiones tu energía se agota y eres más susceptible a comprar los chocolates por impulso (al parecer los supermercados son el mejor lugar para estudiar psicología).
Te estarás preguntando, ¿si el cerebro es como una barrita de energía, no se puede recargar? Buenas noticias, la respuesta es un sí y con algo que todos amamos hacer: comer.
La energía mental deriva su energía de la glucosa (lo sé, trabalenguas). Cuando nuestros niveles de azúcar en nuestra sangre disminuyen, no sólo nuestra energía mental disminuye, nos volvemos también más irracionales.
En un experimento hecho por Baumeister, utilizó una limonada con azúcar y otra con un saborizante artificial para comprobar que la glucosa podía “recargar” el cerebro. Los resultados demostraron que la limonada con azúcar mitigó los efectos del agotamiento del ego o hasta revertía el efecto a diferencia de la otra.
Nosotros hemos experimentado esto en nuestro día a día. En el trabajo o la universidad después de comer nos sentimos más recargados y hábiles de seguir realizando nuestros proyectos.
¿Sabes por qué IKEA o tus centros comerciales favoritos tienen ferias de comida o cafetería? Un motivo es para revertir el efecto de la fatiga de decisiones, restaurarte tu nivel de azúcar en la sangre y puedas seguir tomando decisiones para que compres más y más.
Porqué debes ir a una entrevista de trabajo o tomar cualquier decisión importante por la mañana.
Aunque más vale tarde que nunca, ya habrás notado por qué debes ir a una entrevista de trabajo o sacar una cita para tu visa por la mañana (de ser posible). Si hay algo que quiero que se te quede del artículo es ésto; lo considero un truco para nuestra vida. Ciertamente no porque llegues a las 8 am a la entrevista te van a aceptar. Existen más factores, pero la hora puede influir positivamente.
Ya sea lo que vayas hacer; ir a una entrevista, aplicar a la visa, presentación de tu idea de negocios, llamar a alguien, etc. Hazlo en la mañana o justo después de almuerzo donde los niveles de azúcar están relativamente altos y la fatiga de decisiones no ha entrado en juego. Si aún no me crees te pondré un ejemplo real donde esto puede ser determinante hasta para salir de la cárcel.
Tres prisioneros israelís se presentaron a un juez, un criminólogo, y un trabajador social para ver a quién se le podía otorgar libertad condicional. Ya los tres habían completado dos tercios de su condena. Los casos para su evaluación fueron programados de la siguiente manera:
Caso 1:
Hora 8:50 am
Un árabe israelí sentenciado 30 meses por fraude.
Caso 2:
Hora 3:10 pm
Un judío israelí sentenciado 16 meses por asalto
Caso 3:
Hora 4:25 pm
Un árabe israelí sentenciado 30 meses por fraude
¿A quién crees que le otorgaron la libertad condicional?
Sí, al primero. Investigadores evaluaron las decisiones del jurado y vieron que el mayor factor que influyó en su decisión no fue relacionado con la etnicidad ni con el tiempo de la sentencia o el tipo de sentencia…
El mayor factor fue la hora, aunque el primero y el último hayan sido sentenciados por lo mismo y el mismo tiempo. La estadística mostró que los prisioneros que aparecían en la mañana tenían 70% de probabilidad de ser otorgados la libertad condicional, a diferencia de los presos de la tarde, que obtienen menos de 10%
Si consigues un trabajo o sales de la cárcel por este tip, llámame.
Cómo combatir la fatiga de decisiones
Existen diversos consejos que uno puede seguir para minimizar el efecto de la fatiga de decisiones o saber administrar nuestra energía mental para las decisiones importantes.
Limita tus decisiones diarias
Consiste en eliminar todas las decisiones pequeñas posibles de tu día a día para administrar tu energía mental.
¿Sabes que tienen en común Barack Obama, Mark Zuckerberg, Steve Jobs y Mauricio Rivero (yo)? Utilizan la misma ropa todos los días (lo sé, no soy tan importante como los otros).
Obama era una de las personas más poderosas cuando estaba en la presidencia y estaba consciente de que pequeñas decisiones consumían su energía mental, la cual la podía usar para resolver un conflicto mundial. Obama usaba siempre trajes grises o azules. Mark Zuckerberg, expresa que él limita sus decisiones para no sobre gastar su energía mental, empezando por su forma de vestir. Steve Jobs usaba su cuello tortuga y jeans. Mauricio Rivero usa jeans y suéter verde o blanco (mi presupuesto no da para más ropa).
Tal vez no quieras usar lo mismo todos los días, pero toma las decisiones el día anterior y no en el momento para ahorrar energía, me explico:
- Saca la ropa la noche anterior.
- Decide tu desayuno y saca las cosas necesarias la noche anterior.
- Prepara tu mochila la noche anterior.
- Prepara la comida los domingos para no estar deliberando durante la semana que comer.
- Personalmente como lo mismo todas las semanas y no me hago mala vida; puedes hacerlo o decidir qué comer el día anterior.
- Haz listas de lo que debes comprar para no deliberar en las tiendas.
Existen muchas maneras de limitar decisiones y guardar tu energía mental para las decisiones importantes que puedan venir durante el día. Este tip es uno de mis favoritos para combatir la fatiga de decisiones.
Haz lo más difícil e importante primero.
Consiste en realizar las actividades o las decisiones más difíciles a primera hora en la mañana.
Como vimos anteriormente la mañana es nuestra hora de oro. La tenemos que aprovechar para realizar lo que más se nos dificulta o tomar las decisiones difíciles. Por ejemplo, acostumbro ir al gimnasio en la mañana ya que es algo que en general se me dificulta hacer. Si mi horario lo permite, en las mañanas también escribo estos artículos para ti o hago la investigación de ellos que es lo más difícil.
No sólo puede ser personal, sino cosas que dependan de los demás, como vimos anteriormente. Intenta hacer actividades en la mañana como una presentación al jefe de tu empresa, pedirle dinero a tus papás, entrevista de trabajo, diligencias, etc. La gente no estará bajo el efecto de la fatiga de decisiones y tienes más probabilidades de obtener lo que quieres.
Se ha demostrado que tomamos nuestras decisiones más pausadas y meticulosas en la mañana que otro momento del día. En la tarde comenzamos a tomar decisiones más arriesgadas. Así que, es mejor tomarlas en la mañana, a menos de que te guste la adrenalina.
Planea tu día
Consiste en programar tu día lo más específico posible la noche anterior.
Esta es una buena manera de decidir de antemano y no estar en el mismo día decidiendo qué hacer con tu tiempo. Me he vuelto adicto a esto y me ha ayudado muchísimo.
La noche anterior agarro un cuadernito y escribo todo lo que voy a hacer en el día dividido por horarios. Pongo la hora que me levanto, cuando estudio, cuando descanso, cuando como, etc. Todos los horarios son aproximados.
Teniendo este plan, ya sabes qué hacer con tu tiempo, y no tienes que decidir en el momento. De esta manera no gastas energía deliberando si estudiar o trabajar ahora o después.
Recarga tus baterías
Consiste en recargar tu energía mental con comida o descansos.
Intenta llevar algo de comer siempre a donde vayas ya que te puede ayudar a disminuir el efecto de la fatiga de decisiones. Como vimos anteriormente, te ayuda a subir los niveles de azúcar en la sangre. No sólo disfrutarás comer, sino disfrutarás tomar buenas decisiones. Recuerda intenta no tomar decisiones con hambre, ya que puede que no sean las mejores.
A su vez, si tienes tiempo, toma una siesta. Esto lo hago siempre antes de estudiar y me despierto muy activo para seguir con mi día. La hago normalmente de 25 minutos. No sólo dormir te ayuda a retener mejor la información, sino también a recargar tus pilas.
Si trabajas en Google o la NASA lo podrás hacer ya que se toman muy en serio el descanso. Sin embargo, lamentablemente ninguna compañía aparte de ellas que conozca se toma en serio el dormir. Si trabajas puede que no lo puedas hacer en la tarde, pero ten en cuenta que la siesta es un gran truco para ser más productivo.
El estatus quo
Consiste en tomar la opción estándar o recomendada.
Mi novia odia cuando vamos a un restaurante y pregunto al mesonero/a qué me recomienda para pedir. Ella se molesta y me dice: “Mauricio decide por ti mismo”. La verdad es que con tantas opciones uno no se puede decidir y para gente indecisa como yo, esa es la mejor opción.
Se ha demostrado que mientras más opciones tengamos más infelices seremos ya que dudaremos si tomamos la decisión correcta. Esto es conocido como la paradoja de la decisión que es un artículo para otro momento. Muchas compañías ofrecen millones de opciones, pero normalmente los bestsellers son las opciones recomendadas.
Si no deseas gastar en ciertos momentos mucha energía mental decidiendo qué comprar, recuerda que la opción recomendada puede ser tu ticket de escape para no caer en la fatiga de decisiones.
Crea una rutina
Consiste en crear un ritual a seguir todos los días (en lo posible).
Recientemente escribí sobre este tema en un artículo anterior y seré corto por este motivo. Leí que las personas con las rutinas más estrictas son más felices. Me podría imaginar porqué.
La rutina consiste en elegir un conjunto de acciones que te van a aportar algo positivo a tu vida y que se realizarán en piloto automático sin estar desgastando energía mental decidiendo qué hacer. La rutina es una base para un buen día en la universidad o el trabajo. Ella te ofrece paz mental y evita que caigas en la fatiga de decisiones.
Intenta implementar una pequeña rutina si deseas y verás que se convertirá en tu ritual.
En resumen,
- La fatiga de decisiones consiste en que nuestra habilidad de tomar buenas decisiones se irá deteriorando a medida que más decisiones se tomen a lo largo del día.
- La calidad de la decisión que tomes a primera hora en la mañana no se va a comparar con la calidad de la decisión que tomes en la tarde.
- Tenemos un nivel de energía mental limitado para tomar decisiones y a medida que es usado va a causar la fatiga de decisiones.
- La idea de que tenemos energía mental o fuerza de voluntad limitada proviene de un término en la psicología llamado el agotamiento del ego.
- Mientras más decisiones tomemos nuestra barrita de energía se irá disminuyendo poco a poco. Cada vez que se va disminuyendo nos volvemos más y más irracionales a la hora de tomar decisiones.
- La energía mental deriva su energía de la glucosa. Cuando nuestros niveles de azúcar en nuestra sangre disminuyen, no sólo nuestra energía mental disminuye, nos volvemos también más irracionales.
- Cómo combatir la fatiga de decisiones:
- Limita tus decisiones diarias: Elimina todas las decisiones pequeñas posibles de tu día a día para administrar tu energía mental.
- Haz lo más difícil e importante primero: Realiza las actividades o las decisiones más difíciles a primera hora en la mañana.
- Planea tu día: Programa tu día lo más específico posible la noche anterior
- Recarga tus baterías: Recarga tu energía mental con comida o descansos.
- El estatus quo: Toma la opción estándar o recomendada.
- Crea una rutina: Crea un ritual a seguir todos los días (en lo posible).
Gracias por leer y espero que consigas ese trabajo.
Fuentes
Arjona, A. (12 de febrero del 2019). Qué es la fatiga de decisión y cómo evitar que se apodere de tu vida. GQ. Recuperado de: https://www.revistagq.com/la-buena-vida/articulos/como-tomar-mejores-decisiones-fatiga-de-decision/33231
Baer, D. (28 de abril del 2015). The scientific reason why Barack Obama and Mark Zuckerberg wear the same outfit every day. Business Insider. Recuperado de: https://www.businessinsider.com/barack-obama-mark-zuckerberg-wear-the-same-outfit-2015-4?IR=T
Dobelli, Rolf (2013). The Art of Thinking Clearly. London: Sceptre
Gamb, M. (13 de mayo del 2019). How to Identify When You’re Experiencing Decision Fatigue. Forbes. Recuperado de: https://www.forbes.com/sites/womensmedia/2019/05/13/how-to-identify-when-youre-experiencing-decision-fatigue/#795a69787fb4
Hoomans, J. (20 de marzo del 2015). 35,000 Decisions: The Great Choices of Strategic Leaders. Roberts Wesleyan College. Recuperado de: https://go.roberts.edu/leadingedge/the-great-choices-of-strategic-leaders
MacKay, J. (1 de febrero del 2018). Decision Fatigue: What it is and how it’s killing your focus, motivation, and willpower.RescueTime: blog. Recuperado de: https://blog.rescuetime.com/decision-fatigue/
Patel, D. (28 de noviembre del 2018). 9 Ways to Combat Decision Fatigue. Entrepreneur. Recuperado de: https://www.entrepreneur.com/article/323748
Tierney, J. (17 de agosto del 2011). Do You Suffer From Decision Fatigue?The New York Times. Recuperado de: https://www.nytimes.com/2011/08/21/magazine/do-you-suffer-from-decision-fatigue.html
Walker, M. (2017). Why We Sleep: The New Science of Sleep and Dreams. London: Allen Lane
Me gustó mucho! Son muy interesantes y escritos de manera entretenida que capta la atención del lector.
Ya espero los siguientes!!!
Gracias ❤️
Interesante el artículo! Sin embargo me queda una duda, y es que si la primera hora del día es la mejor para tomar buenas decisiones (i.e. racionales), cómo puede eso ayudar a conseguir lo que quieres, si dependes de que ya la persona esté fatigada de tantas decisiones que simplemente se vaya por la más fácil o con la que mejor logres persuadirla? Por ejemplo, el caso de pedirle dinero a tus papás, o una entrevista de trabajo para la que no te preparaste bien o no cumples las cualificaciones requeridas (todo en el marco de este artículo). Cómo podrían tus padres en su sano juicio objetivamente razonar que darte dinero a penas se los pidas es la mejor opción de todas? XD Fíjate que estoy aplicando el mismo principio que el que citas del supermercado, poner los dulces al final (lo cual por cierto no funciona conmigo xD)… Aquí es donde me parece que se contradice la teoría, aunque en general la encuentro interesante.
Acerca el tema de los supermercados ciertamente hay mucho que decir, de hecho había leído sobre un razonamiento, si se quiere ortogonal al que expones, en el que los vegetales están colocados al principio para que uno decida alimentarse sano, y luego los dulces al final para que «consientas» a tu yo interior que ya se preocupó suficiente por su salud mientras hacías la compra xP.
Hey Christian!
¿Cómo estas? Me encantó tu comentario. Todas tus dudas y puntos son totalmente válidos. Fue un poco difícil entender algunas, pero intentaré responderla con el conocimiento que he leído al respecto.
Primero, no estoy expresando que sólo por el hecho de hacer una entrevista en la mañana o pedirles dinero a tus papás en la mañana vas a obtener el trabajo o recibir el dinero. Lo que quiero decir es que a medida que pasa el tiempo nosotros y las personas nos vamos cansando de tomar decisiones y luego actuamos por impulso. No tenemos la cabeza tan fresca y a veces la información no es tan bien procesada como en la mañana.
Por ende, tomar decisiones o hacer cosas en la mañana puede beneficiarte y ser uno de los varios factores que hacen que la persona de la entrevista o de la visa no esté cansada, esté de buen humor e influya positivamente en su decisión. Ciertamente las calificaciones y tu experiencia tienen un peso mayor, pero siempre hay mil y un factores que influyen en las decisiones. Puse el ejemplo de pedirle dinero a tus padres ya que en las noches están más cansados y puede que no quieran tomar una decisión y sólo digan que no (me ha pasado jajaja).
Bueno, y si no te está sirviendo colocar los chocolates al final (a mi tampoco me sirve), elimínalos de tu ambiente, es decir, hazlos invisibles como dice James Clear. Así la tentación se irá.
No había leído ese dato de los supermercados, me parece interesante. Sin embargo, había leído que ellos colocan los vegetales al principio para llamarte la atención con sus colores fuertes para que entres al supermercado y compres.
Saludos!
Muy buen articulo!
Gracias Felipe! ❤️
Muy bueno! me encantó, lo compartiré con mi familia y la gente de mi oficina
Gracias Gabriela! Me alegro que te haya gustado 😁